martes, 30 de marzo de 2010

No hablo de estar enamorado cuando hablo de amor.
No hablo de sexo cuando hablo de amor.
No hablo de emociones que sólo existen en los libros.
No hablo de placeres reservados para los exquisitos.
No hablo de grandes cosas.

Hablo de una emoción capaz de ser vivida por cualquiera.
Hablo de sentimientos simples y verdaderos.
Hablo de vivencias trascendentes pero no sobrehumanas.
Hablo del amor tan sólo como querer mucho a alguien.

Y hablo de querer no en el sentido etimológico de la posesión, sino en el sentido quele damos coloquialmente en nuestros países de habla hispana.



Fotografía y Arreglo Digital
LDG. Ratzeya

Entre nosotros, rara vez usamos el "te amo", más bien decimos "te quiero", o "te quiero mucho", o "te quiero muchisimo".
Pero ¿qué estamos diciendo con ese "te quiero"?
Yo creo que decimos: me importa tu bienestar.

Cuando quiero a alguien, me doy cuenta de la importancia que tiene para mí lo que hace, lo que le gusta y lo que le duele a esa persona.

No hay comentarios:

Anogarratzeya

Anogarratzeya